viernes, 3 de septiembre de 2010

cariño.

He decidido darte permiso
(como si pudiera yo darte permiso,
como si por escrito funcionase así)
para empaquetarlo todo y aplastarme
con kilómetros
si algún día te discuto mientras digo cariño-mi amor-mi vida.
Y pide explicaciones a esa
en la que me habré convertido
(que te diga dónde estoy, qué hizo de mí)
si-ya los pezones tristes ya tus ojeras crónicas-
me acostumbro a llamarte papá.

7 comentarios:

  1. Breve incursión por tus dominios. Me temo que mis ojos van a dolerme, oteo un paisaje de floresta con mucho que mirar y degustar. Nos leemos

    ResponderEliminar
  2. Vaya, parece que voy a dejarme también los ojos en este rincón donde la palabra reverbera entre las sombras. Un placer leerte y ser leído por vos.

    ResponderEliminar
  3. Qué bien tu incursión, Januman. También estás invitado a mi rincón. No tengo silla con tu letra, me temo, pero sí varios modelos de maleta-mochila-macuto llenos de trastos entre los que hurgar (o a tu disposición si te apetece pegarte una escapada). Te leo me lees.

    ResponderEliminar
  4. Me gustan especialmente estas dos últimas entradas por dos cosas: a) son verdad, se leen verdad. b) te trascienden, dejan atrás tu vida aunque salgan de ella -y te juro que eso es bueno-.
    En este veo, hablando de todo un poco, no sólo miedo sino también coraje, ganas de doler un poco. No es malo.
    Qué bien que me hayas llamado. Iba a decir "estos días son raros". Pero cómo no van a ser raros si acabo de llegar, si es un día singular.

    ResponderEliminar
  5. Me dispongo a hurgar en las entrañas de este blog. No te preocupes, soy inofensivo,me limitaré a darme un baño de espuma con tus palabras, quizás hagamos buenas pompas.

    ResponderEliminar
  6. Cómo me gusta que te gusten, Clara. Y que no se te haya escapado el coraje de esta última (eternamente agradecida al andaluz por su 'coraje').
    Anoche escuché a Camille y me teletransporté mentalmente a las calles de París que apenas recuerdo.
    Amuse-toi!

    ResponderEliminar
  7. ¡Qué geniales los baños de espuma! si consigues un efecto parecido por aquí, me sentiré de verdad halagada, Januman.

    ResponderEliminar